Mi pueblo se transforma, la gente está
cargado y abrumada de tanta incertidumbre, los jóvenes viven un mundo aparte,
marcado por un gran desinterés por los valores éticos y morales, en toda la
extensión de su significado, los jóvenes que piensan que vivir con reglas no es vivir, donde la
libertad se reclama como sumo derecho a vivir como tú quieras, faltándole
respeto a todos los demás, sin consideración alguna.
Me preocupa mucho esa percepción errónea de
los valores humanos, que se refleja en todo lo ancho de nuestra sociedad, donde
se ignora la importancia de estos valores morales y éticos, que fueron
trasmitidos por nuestros padres de generación en generación y que dieron
sentido de humanidad a nuestra sociedad que marcaban unos estilos de vida de conducta
moral más civilizado de un profundo sistema de dignidad aprecio y estimación
de las personas, que convivían con gran
sentido de respeto y tolerancia, que se reflejaba en una mejor calidad de vida
comunitaria.
Pero hoy vemos una nueva sociedad que se
aparta totalmente de esos valores éticos y morales, en todas sus
manifestaciones en todo el espacio que nos rodea y que están afectando
profundamente la calidad de vida y nuestras relaciones con los demás. Estamos
peligrosamente relegando los principios que son el fundamento de nuestra
cultura humanista de ser buenos puertorriqueña que nos distinguimos por la
bondad, la libertad, la justicia, la tolerancia y La honestidad.
Nos estamos desvinculando de nuestros
tradicionales valores religiosos, que son ese espacio sagrado que nos eleva
nuestra dimensión como seres humanos, como lo es el amor a Dios y a nuestro
prójimo y que nos permite encontrar la verdad y el conocimiento de esos valores
éticos que rigen nuestra conducta como personas, de bien que nos ubica como
hijos de Dios y hermanos de Cristo en toda nuestra dimensión como personas en armonía
con toda la sociedad y con uno mismo. Que define nuestra conducta moral, la
virtud, el deber, la felicidad y el buen vivir.
Me preocupa mucho esa nueva juventud y su
pobre visión de lo que son los valores
morales, pues son estos jóvenes la base de todo pueblo y los que en un futuro
no muy lejano tomaran las riendas de nuestro de nuestra sociedad, pues un joven
que tenga los principios morales correctos, llevara a su pueblo a la superación
y crecimiento en todos los ámbitos de este, pero si por el contrario tiene una
visión incorrecta de la moral su efecto será desastroso para nuestro pueblo.
Los padres tenemos la obligación de retomar
el control de la educación y la formación de nuestros jóvenes y adolescentes de
manera que podamos ofrecerles una mejor calidad de vida hacia el futuro.
Tenemos que trasmitirles esos valores universales que son la base de nuestra
sociedad, como lo es la honestidad, el sentido de dignidad, la libertad y el
respeto a los demás, aun cuando los demás no piensen como yo pienso, eso es
tolerancia, que tanta falta nos hace para que vivamos en paz y armonía en
nuestro pueblo.
Vivir bien no es contrario a vivir con
reglas. El gran escritor Michel de Mortaje decía "La verdadera libertad
consiste en el dominio absoluto de sí mismo". Todos los excesos son malos,
tenemos que aprender a ser moderados. Y mostrar gratitud a los demás, hay que
aprender a dar las gracias, cuando recibimos algo en forma gratuita.
Hay que aprender que nadie es lo
suficientemente pequeño o pobre para ser ignorado. Y sobre todo tenemos que
enseñarles a nuestros hijos la capacidad para reconocer y aceptar las
consecuencias de un hecho realizado libremente. Para que sepan que deben tener
sumo cuidado y atención en todo lo que hacen o deciden. Pues según J.W. Goethen : "Pensar
y obrar, obrar y pensar es la suma de toda sabiduría”.
Si tomamos la responsabilidad de educar
mejor a nuestros jóvenes, el futro de nuestro pueblo, será muy prometedor, pues
la juventud es la esperanza de nuestro futuro, hagamos que brille en ella la
luz de la fe, el amor y el perdón.
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